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La cocina vietnamita es una de las mejores del mundo y con razón, ya que es variada y sencilla además de tener miles de sabores llenos de matices.
Es una cocina fácil y sana, ya que no abusa de las grasas y lo mejor es que emplea una gran variedad de ingredientes, mostrando así la influencia de los países cercanos o de los que convivieron con sus gentes en algún momento de la historia.
Esta semana te queremos mostrar un pequeño ejemplo de la riqueza de esta cocina a través de una de sus recetas más populares, la sopa pho.
1 kg de huesos de ternera (compra huesos que den mucha gelatina, como por ejemplo, de rodilla)
10.5 kg de carne de ternera
2 piezas de unos 5 cm de jengibre
Una cebolla abierta en dos
Un nabo chino (tipo daikon)
4 piezas de anís estrellado
1 pieza de cassia
1 cardamomo negro
8 clavos de especia
½ cucharada de pimienta
2 cucharadas de salsa de pescado
2 cucharadas soperas de azúcar amarilla en roca
Sal
Glutamato monosódico
Ban Pho noodles (tallarines vietnamitas de arroz de 1’5-2 cm de ancho. Como sustituto puedes usar unos tallarines de arroz tailandeses)
Un paquete de carne en carpaccio (opcional)
Cebolleta china picada en aritos
Cilantro
Menta entera
Chiles birds eye (chiles picantes tailandeses) picados en aritos
Lima en gajos
1.- En el horno, gratina el jengibre y la cebolla hasta que la piel se queme y queden dulces y tiernos por dentro.
2.- Gratina también los huesos en el horno.
3.- Dora la carne en una olla por tandas, desglasando antes de añadir la siguiente.
4.- Cuece todo en una olla express durante 1’5 horas. Cuela el caldo y desgrasa en un separador de grasas o con una superbag. Reserva la grasa y el caldo colado.
5.- En una cazuela para pasta, cuece los tallarines hasta que estén hechos.
6.- Ponlos en un escurridor y enfría bajo un chorro de agua fría.
7.- Se sirve una porción en cada bol.
8.- Pon cada uno de los ingredientes del “aliño” en boles individuales para que cada uno se sirva a su gusto.
9.- Calienta el caldo y cuando esté hirviendo, añádelo sobre los boles con los noodles.
10.- Después, pon encima unas láminas de carne de carpaccio (en un pho tradicional, también se añadiría la carne junto con trocitos de tendones melosos).
11.- Con un exprimidor, exprime un chorrito de jugo de lima y adereza con los ingredientes que más te gusten.
Y para que además de una sopa deliciosa, llame la atención, no se te debe olvidar elegir un bol cerámico adecuado para presentarla y servirla. Así ya será un plato redondo.
Esta receta es de Íñigo Aguirre "Umami Madrid".
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