Categorías : Conoce tus utensilios de cocina 
Muchas veces, obtener los resultados culinarios deseados depende en gran parte de alcanzar la temperatura perfecta. Conocer la temperatura de tus alimentos es indispensable para asegurar la calidad o seguridad de estos. Por ello, los termómetros de cocina serán tus mejores aliados.
1. Aunque marquemos en nuestro horno la temperatura que indica la receta, el calor que este desprende varía según la marca o modelo. Usar un termómetro de cocina te permitirá conocer la temperatura real de tu elaboración independientemente de esto.
2. Lo creamos o no, la temperatura que alcanza un alimento puede intervenir en su sabor, aroma o textura. Es por ello por lo que, en algunas técnicas de cocina como el sous vide, el conocer la temperatura exacta a la que estamos sometiendo nuestra materia prima es indispensable.
3. No podemos ignorar la seguridad alimentaria. Conocer la temperatura a la que sometemos ciertos alimentos es obligatorio para garantizar que se eliminen ciertos microorganismos, haciendo que su consumo sea 100% seguro.
Como todo, este utensilio de cocina ha ido evolucionando con el tiempo, mejorando su precisión y dando lugar a varios tipos de termómetros con aplicaciones y características diferentes, algo a tener muy en cuenta a la hora de comprar el que más se adapte a tus necesidades.
Veamos pues, los diferentes tipos de termómetro y sus aplicaciones y ventajas, para ayudarte a elegir el que más te convenga.
El termometro sonda es quizá el más utilizado a nivel doméstico, por lo fácil que resulta su uso. Suelen constar de una sonda que se introduce en el alimento o bebida, esta sonda cuenta con unos sensores que captan la temperatura y te la muestran en una pantalla en formato analogo o digital en apenas segundos, es fácil y rápido.
Además, en el caso del termometro digital de sonda son un tipo de termómetro muy preciso, permitiéndote conocer la temperatura exacta del alimento, con un rango de error de apneas 0,1ºC. Pueden resultar muy útiles cuando necesitas monitorear la temperatura del alimento que estás cocinando.
Ten en cuenta que estos termómetros no son los indicados para las temperaturas más altas, como las alcanzadas en una barbacoa, por ejemplo, pero resultan un todo terreno muy practico ya que son faciles y rápidos en su uso: masas, chocolate, almibar, carnes asadas, aceite para freír y un sinfin de aplicaciones.
Cuando cocinamos algunas carnes, como puede ser un pollo, es imprescindible asegurarse de que el interior de este esté hecho y sea seguro para su consumo. Aquí es donde entra el termómetro de sonda termoresistente o termometro de carne, resulta idóneo para medir la temperatura interior de los alimentos.
Estos termómetros tienen una sonda metálica que se inserta en el alimento. Existen modelos con un cable resistente al calor que va unido a la sonda en un extremo y a una pantalla en el otro, permitiendo monitorear la temperatura de la elaboración sin tener que abrir el horno.
En cuanto a ventajas, la primera está su precisión pues, al insertar la sonda en el interior del alimento, puedes ver de forma precisa la temperatura interna del cocinado. La otra gran ventaja de este termometro es que puedes programar la temperatura y punto deseado y te avisa cuando se ha llegado a dicha temperatura. Esto es importante cuando queremos cocinar las carnes y proteinas a cierto punto (roast beef mas o menos hecho, pescado asado o incluso cocción a baja temperatura) o un aviso cuando el aceite llegue a la temperatura a la que queremos freír.
Con este termómetro ¡se acabarón las incertidumbres de cuanto tiempo asar y las carnes pasadas cual suela de zapato!
Una de las desventajas podría ser que, si no se limpia correctamente tras su uso, puede conllevar a una contaminación cruzada al insertarse en otro alimento, esto es el cado de todos los termometros de sonda.
Siguiendo el tema de evitar la contaminación cruzada, el termómetro láser, que mide la temperatura de tus alimentos sin necesidad de contacto, es cada vez más popular. Para su uso, sólo tienes que apuntar a tu elaboración para que aparezca la temperatura de esta en la pantalla.
Son muy útiles para medir la temperatura de superficies, como la de una sartén antes de cocinar en ella. O para medir la temperatura de líquidos sin tener que introducir nada en ellos. Tambien te permite saber si tu horno tiene puntos calientes o zonas con calor desigual.
La principal ventaja es lo limpio que resulta y, por supuesto, la velocidad con la que puedes tener el resultado. Apenas segundos.
Aunque su principal desventaja es que no sirve para medir la temperatura interna de tus elaboraciones, sino que están pensados para medir la temperatura superficial de estas, algo para tener en cuenta a la hora de su uso.
Cuando preparamos cualquier receta que requiere de horno para su cocinado, siempre se indica cierta temperatura. Esto es porque llegar y mantener la temperatura ideal es primordial para conseguir el resultado necesario. Es aquí donde entran los termómetros para horno, diseñados para resistir altas temperaturas, se colocan en el interior del horno para monitorear la temperatura de este constantemente. Permitiéndonos tomar las medidas necesarias si no se llega a la temperatura indicada o si, por el contrario, se está calentando de más.
La principal ventaja sería su facilidad de uso, pues sólo tienes que colocarlo e la rejilla de tu horno y podrás observar la temperatura de este. Los hornos domesticos pueden (por ley) variar hasta 20ºC de la temperatura que establezcas en el termostato por lo que saber la temperatura "real" es conveniente.
Este termómetro sólo mide la temperatura interna de tu horno, no la del alimento en sí, por lo que, si quieres saber la temperatura interior de tu elaboración, tendrías que optar por uno de sonda.
Estos termómetros se caracterizan porque pueden medir sin problemas temperaturas muy altas, de alrededor de 200ºC. Además, cuentan con un clip para sujetarlos a la superficie de la olla en la que estemos calentando nuestra elaboración, permitiéndonos que estén completamente firmes durante el cocinado, pudiendo comprobar en todo momento la temperatura de este.
Además, suelen estar hechos de vidrio, un material resistente a la erosión que puede causar el azúcar o aceite a altas temperaturas.
Creemos que vale la pena, además, hacer una mención especial al termómetro Meater+, un termómetro digital inalámbrico de última generación que pasa al siguiente nivel. Consta de un pequeño pincho, completamente inalámbrico y de una gran precisión para medir temperaturas. Además, gracias a su aplicación móvil, a la cual se conecta con Bluetooth, no sólo verás la temperatura interior de tus elaboraciones sino consejos para el cocinado de esta, como el punto de la carne o el tiempo de cocción en función del tipo de alimento.
Tal como hemos visto, existen varios tipos de termómetros de cocina en función de lo que estemos buscando conseguir con ellos. Se trata de un indispensable en tu cocina que te ayudará a garantizar la seguridad y la calidad de tus elaboraciones, por lo que tener al menos uno entre tus utensilios es primordial.
Ahora que ya sabes todo sobre ellos, ¿con cuál te quedas?
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