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Las navidades son fechas de comer en familia o con amigos. Quizás al cocinillas de la familia le ha tocado preparar la cena o poner la casa, o a lo mejor, simplemente, lo celebras en pareja, con la familia más cercana o tiras la casa por la ventana e invitas a todos a celebrar la Navidad. Aun así, seáis 2 o 20, siempre hace ilusión ser recibido calurosamente y sentarse en una mesa vestida para estas cenas tan especiales y únicas en el año. Por ello, te traemos en este post las tendencias navideñas y consejos para ir a la última con tu mesa.
Empecemos por los colores. La Navidad tradicionalmente se viste de verde, rojo y blanco, y son los colores navideños por excelencia que nunca fallan. En estas navidades 2019-2020 la tendencia son los metálicos, no excesivamente brillantes, y también el dorado, negro y el azulino marino llamado teal. Una vez que decidas como te apetece poner tu casa, más clásica o más moderna, damos paso a la elección de todo lo demás.
¿Con mantel o salvamantel? ¿Liso o con temática navideña? Estas son las dos primeras preguntas que puedes hacerte a la hora de pensar la base de la decoración de la mesa.
Si quieres darle un toque rustico y tienes una mesa de madera grande, puedes poner salvamanteles monocromáticos, en vez de mantel. Sin embargo, lo habitual en las casas es ponerlo (¡y bien planchado!). Si quieres dar un toque elegante, opta por manteles de un solo color de los que están en tendencia, o si por el contrario, tu temática es el clásico rojo y verde, déjate llevar por el espíritu navideño y pon ese mantel especial que lleva guardado todo el año con renos, acebos, muñecos de nieve y toda la iconografía navideña. Si además de la cena de nochebuena tienes más celebraciones, hay manteles de un solo uso con una textura de tela fabulosa son geniales y están disponibles en rollos para todos los tamaños de mesas y en los colores tradicionales.
Las servilletas deben ir en la linea de cromática elegida y dependen de la elección del mantel. Si escoges un mantel temático, recomendamos unas servilletas más sencillas y lisas para no recargar la decoración. Por el contrario, si escoges un mantel liso, dale vida con una servilleta con decoración.
Ahora, de ¿tela o papel? Ambas tienen sus pros y sus contras. Las de tela son más ecológicas y son las que reservas para estas fechas, pero dan algo más de trabajo. Antaño las de papel resultaban menos elegantes, pero hoy en día hay unas de un solo uso con tacto de tela estupendas, lisas y con motivos decorativos. No requieren lavado y son más higiénicas.
¿Y dónde las ubicamos en la mesa? Puedes ponerlas dobladas a la mitad al lado derecho del comensal, o vestirlas con un servilletero en forma de aro y colocarlas sobre el plato.
Saca la cubertería de plata o la mejor que tengas en casa de más de 3 piezas, este es el momento de lucirla. Si quieres hacer algo diferente, la tendencia esta en cuberterías doradas, cobre o negro. Todos los colores son navideños y crean una ambiente festivo. A los peques de la casa les puedes poner unos más ligeros con decoración navideña, si los que vas a usar pesan mucho.
La Navidad es para disfrutarla, y en estas cenas más. Haz todo a lo grande, saca y usa tu mejor de vajilla de 4 platos si tu menú los requiere (el plato de aperitivos, el hondo, el del plato principal y el de postre) y su bajo plato. Si decides que tu mantel sea blanco, puedes darle color a la mesa con la vajilla (roja, azul, verde,…) y viceversa, si el mantel es temático, puedes armonizar con una vajilla blanca.
Esta de moda combinar diferentes platos, colores y motivos, no tengas miedo a completar y combinar tu vajilla con otros diseños. Tampoco tengas miedo a cambiar de textura y pasar de porcelana a gres o de gres a porcelana para diferentes platos.
Un truco para que la mesa no parezca sobrecagada si tienes mucha gente y mucha vajilla es utilizar elementos como el plato de pan de cristal o el bajo plato de cristal.
Es un día especial y seguramente servirás vino blanco, tinto y champán o cava, pues asegúrate que tienes copas para ello. Saca esa cristalería especial que no sueles utilizar habitualmente, tu familia y amigos se sentirán cuidados y homenajeados al ver tu despliegue de cosas bonitas. Entrar y ver una mesa vestida con los 3 o 4 tipos de copa por comensal da la sensación de estar a un auténtico banquete. Combinar el cristal también está de moda. No dudes en cambiar la copa de agua por un vaso colorido y divertido o cambiar de modelo entre copas de vino, lo importante es crear armonía entre lo que vayas a usar y que todo ello conjunte, no que todo sea igual.
¡Ah, y si tienes mucha gente y quieres que recuerden su copa, las puedes personalizar con unos marcadores de colores o con temáticas!
Una mesa auxiliar resulta de gran ayuda en estas ocasiones, incluso una plegable de catering que puedes cubrir con un mantel. En ella puedes dejar sacacorchos, jarras y cubitera con las bebidas para mantenerlas frías. Además, también es perfecta para tener listos los platos para el cambio de plato y apilar los sucios antes de llevarlos a la cocina. Incluso se pueden dejar cafeteras, teteras, las tazas para el té o café y los platos de postre para el final de la cena. Para los que fumen y hagan sobremesa, puedes tener listos ceniceros.
Un centro de mesa hace bonito y nos recuerda que estamos en una ocasión especial que solo acontence una vez al año. Puede ser de cerámica, de flores, cristal, de piñas secas, de bolas de navidad...siempre da un toque festivo y especial. Sea cuál sea tu decoración, las ramas verdes de pino y abeto casan con todo y siempre son un éxito. Puedes encargarlo o también puedes ser creativo y hacerlo ¿a qué no se te ha ocurrido preparar tu propio centro de mesa con los tarros de mermelada, o con pasteleras? con los tarros de cristal, puedes introducir una vela en su interior y alrededor incorporarle bolas de navidad, ramas de abeto, piñas secas o llenarlo de lo que quieras con motivos navideños y de esta forma personalizas y haces tu centro de mesa reciclado, ecológico e imaginativo.
Una vez vestida la mesa, el chef de la velada debe ir acorde a la situación y cocinar con el espíritu navideño que requiere la ocasión, es por ello que no puede faltar en tu cocina delantales, paños o manoplas navideñas.
Y por último, pero no por ello menos importante, una Navidad no es Navidad si no hay un jamón en la cocina en un buen jamonero, junto con un cuchillo bien afilado para cortarlo. ¡Se volverá el centro de reunión informal de la casa durante las fiestas!
Ahora que todo esta listo ¡a disfrutar de la compañía!
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